Foto: Photo Escudo
Es un destino muy visitado por locales y extranjeros. Ofrece mucho que hacer y que visitar, siendo uno de sus principales atractivos la reserva de la biósfera de la mariposa monarca, un sitio nombrado patrimonio de la humanidad por la Unesco y uno de los destinos más importantes de ecoturismo de México.
Piedra Herrada es uno de los tres santuarios de la mariposa monarca en el estado de México, en donde cada año, a fines de agosto, esta especie de mariposas, muy distintivas por su patrón de colores naranja y negro, migran desde Canadá y los Estados Unidos hasta Michoacán y el estado de México para huir del frío invierno, para regresar a mediados de marzo. Este viaje dura dos meses, en los que viajan distancias de hasta 6,400 kilómetros. Piedra Herrada queda a 30 minutos de Valle de Bravo y para llegar hasta donde están los miles de hermosas mariposas naranja, debes subir a pie o a caballo (toma 1 hora y 30 minutos). El área en donde están las mariposas está protegida y vas con un guía. Verás enormes enjambres de mariposas colados de los árboles (parecen panales de abejas) y las verás revolotear en el cielo y a tu alrededor, es una hermosa experiencia.
En el pueblo de Avándaro, a un lado de Valle de Bravo, encontrarás restaurantes, cafés y “boutiques” hay una finca de árboles de Navidad que ofrece además actividades para niños y jóvenes, como tirolesa, tiro al arco, paseos a caballo y más. Hay una cancha de golf y dos lindas cascadas que puedes visitar. La más conocida es la cascada Velo de la Novia, la cual tiene un camino pavimentado muy fácil de recorrer. La otra es la cascada Refugio del Salto, la cual tiene un camino rústico que llega hasta el nacimiento de la misma (toma 20 minutos). Valle de Bravo está al lado de un lago y entre varios cerros y hermosas montañas que ofrecen vistas espléndidas de la región, por lo que hay muchísimas actividades acuáticas y deportivas.
Desde pasear en lancha sobre el lago, esquiar, pescar, hacer kayak, “waterski” y otros deportes acuáticos. Si te gusta la adrenalina, es un destino conocido para hacer parapente y vuelos delta, paseos en moto, 4x4, “Four Wheel”, senderismo, montañismo, ciclismo o rapel, entre otras actividades.
El zócalo de este pueblo, Plaza Independencia, tiene mucha vida y todas las características de un poblado típico mexicano. En su quiosco se presentan bandas locales los domingos por la tarde. Embellecido por la emblemática parroquia de San Francisco de Asís, que data del siglo XVII, y por fachadas coloridas de adobe, madera y tejas y por una arquitectura tradicional colonial, hay puestos de venta de comida, museos, un “callejón del hambre”, con vendedores ambulantes de todo tipo de comida, heladerías, mercaditos, restaurantes y bares. El pueblo tiene calles empedradas y la mejor forma de visitarlo es a pie, puedes recorrer sus calles y aprovechar para visitar las galerías, jardines, “boutiques” y tiendas de artesanías. Hay un pequeño mercado municipal y un mercado artesanías en donde puedes encontrar todo tipo de recuerdos de tu visita.