Consejos para emprender en medio de la pandemia

Estamos pasando por un momento nunca antes visto en nuestra historia. Por primera vez en nuestras vidas, literalmente todo el mundo está parado, a excepción de ciertos rubros que tratan con necesidades básicas.

En medio de esta incertidumbre los países han hecho leyes que permiten que las empresas que no están operando  suspendan a sus colaboradores con el propósito de proteger el flujo de caja, permitiendo que dichas empresas existan una vez acabe la pandemia y que los colaboradores puedan tener un lugar a donde regresar.

En Panamá poco a poco estamos volviendo a la "nueva normalidad". Hasta mayo habían sido suspendidos más de 110 mil colaboradores, aunque con la apertura de bloques poco a poco van regresando algunos trabajadores a sus puestos.

No sabemos por cuánto tiempo vamos a tener los contratos suspendidos. Asumo que vamos a ir incorporando a los colaboradores de forma escalonada, de acuerdo a la apertura de cada bloque, dependiendo de la industria en la que opere la empresa. Lo cierto es que estamos en medio de muchísimas dudas y que nadie tiene una respuesta concreta.

Esta situación de incertidumbre causa ansiedad para todos, en especial para los que no vislumbran claramente su futuro profesional en este momento. Sin embargo, las personas con contratos suspendidos tienen en sus manos la oportunidad de poner en marcha una nueva empresa para sobrellevar estos tiempos, y si les va bien o les gusta, la pueden continuar y ver crecer.

Si esta es tu situación y te preguntas si debes emprender, te quiero pasar algunos consejos concretos que te pueden ayudar a determinar si tienes una idea de negocios buena en mano y sin que el proceso te cueste mucho.

1. Empieza por elegir un área que conozcas: Tienes habilidades y experiencias que te hacen única. Tu idea de negocio debe enfocarse en una industria que conozcas, ya sea porque estudiaste algo relacionado o porque tienes experiencia. Debe gustarte leer acerca de los temas relacionados a la idea y debes tener contactos y poder relacionarte con los principales actores de la industria que elijas.

Recuerda que nadie te puede quitar tus conocimientos, habilidades, experiencia y contactos. ¡Este es el momento de usarlo todo!

Así mismo, debes estar consciente de la situación en la que vivimos. Los hábitos de los consumidores han cambiado drásticamente como resultado de la pandemia y debes estar atenta a las oportunidades así como a los riesgos que hoy existen al emprender un nuevo negocio.

Por ejemplo, no es el momento de comenzar una empresa organizadora de eventos pues no se permiten las aglomeraciones. Sin embargo, puedes arrancar un negocio organizando eventos masivos en línea y cobrando un porcentaje del precio de admisión.

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2. Conoce a tu competencia: Si ya escogiste una idea de negocio y crees que puedes vender en este momento,  es crítico que conozcas a tu competencia antes de lanzarte al mercado. Debes saber cómo tu competencia se maneja, atraen clientes, quiénes conforman sus equipos y qué tipo de productos o servicios venden. 

Por suerte, una investigación de la competencia se puede hacer muy fácilmente mediante Google y revisando las redes sociales. También puedes preguntar a amistades o familiares si han tenido experiencia con esa empresa y sus impresiones de la misma.

Conocer a tus competidores te permitirá detectar oportunidades que quizás ellos no han vislumbrado, lo que se volverá tu factor diferenciador.

3. Escoge el modelo de negocio indicado: Modelo de negocio se refiere a cómo vas a hacer dinero, ya sea que cobres una subscripción mensual, por producto o servicio; ganes dinero de comisiones, vendas al por mayor, etc.

A veces las ideas de negocio saltan entre modelos de negocio hasta que encuentran su lugar perfecto en el mercado.

4. Prueba en versión beta: Te aconsejo probar una versión inicial de tu producto o servicio antes de invertir grandes cantidades de dinero en la misma.

Por ejemplo, en vez de comprar inventario, te sugiero que seas comisionista de alguna empresa que distribuya los mismos productos o servicios, o que atienda a un público similar al que tienes en mente.

De esta forma, puedes conocer el mercado sin tener que arriesgar tu capital. Si ves que tienes éxito y que puedes crear una comunidad interesada en lo que tienes que decir y vender, entonces invierte en inventario propio.

Tampoco es el momento para gastar dinero formalizando el negocio. No necesitas logos caros, branding, páginas web, sociedades anónimas, entre otros para comenzar. Puedes manejar tu emprendimiento a título personal, siempre y cuando cuentes con un Aviso de Operación, el cual cuesta muy poco.

5.. Enfócate en el mercadeo: Un negocio nuevo necesita clientes antes que nada. Como dije arriba, compra lo mínimo para operar pero haz todo lo posible por hacer conocer tu negocio. Dependiendo del tipo de empresa, necesitas un mínimo de clientes para saber si la idea es factible. 

Concéntrate en crear contenido divertido que explique lo que haces y/o lo que vendes y de crear una comunidad comprometida alrededor de tu emprendimiento. Te aconsejo ser auténtica y conectar con tu público de una manera honesta y transparente. Hoy en día el consumidor busca confiar en el negocio y en tener una conexión con las personas detrás del mismo.

Entrevista a esos primeros clientes y trata de entender sus necesidades y expectativas para así ir mejorando tu oferta todos los días.

Espero haberte podido ayudar en esta etapa de planeamiento de tu nuevo negocio. Me puedes contactar a info@studiocamelia.com si tienes alguna pregunta concreta. Te invito a mi blog: www.studiocamelia.como

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