Vie, 08/23/2019 - 13:00
- Entrevistas
Brigit Casis habla de su vida, sus hijos y cómo llegó sumergirse en el mundo del erotismo. Mira la entrevista en video.
- Milagros Murillo F.
- mmurillo@epasa.com
- @milagrosmf18
Foto: M. Murillo
Brigit Casis es una mujer polifacética. Fue bailarina exótica y ahora, con 50 años y dos hijos se ha convertido en una empresaria, embajadora de juguetes sexuales en Panamá. Sobre su vida se conoce poco, por eso, conversó con el equipo de Contenido Premium para descubrir a la Brigit más allá de los temas sexuales y conocer cómo quedó inmersa en este mundo.
La entrevista fue de menos a más. Brigit rememoró cuando tuvo a su hija Anais, quien ahora tiene 25 años y es chef de profesión. La empresaria recuerda que la llevaba a sus prácticas como bailarina exótica. "Ella decía: ¡ay! es que mi mamá tiene puras amigas que son artistas", cuenta Brigit, quien explica que nunca le generó el morbo a su hija y la acostumbró a diferenciar qué tipo de mujeres había y a no criticar.
Lo mismo ocurrió cuando nació su hijo Otto Alexander, quien tiene 16 años y se inclina por el arte musical.
Brigit explica que, a pesar de que era bailarina exótica, invirtió mucho en la educación de su hija y lo está haciendo ahora con su hijo. Destinó dinero en clases de verano, teatro, idiomas, modelaje, bailes, cerámicas y demás, "porque me gustaba que ella tuviera diferentes tipos de amistades".
"A veces los papás encasillamos a los hijos con solamente la escuela y los amiguitos de la escuela. Mi hija actualmente tiene amigos en todos los ámbitos".
La experta en juguetes sexuales destaca que las actividades extracurriculares son importantes, porque "ahí es donde está la verdadera educación".
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Para Brigit, los padres deben enfocarse y hacer sacrificios, "tienen que buscarle otra enseñanza para que ellos puedan aprender otras cosas, por eso es que yo no tengo problemas con mis
hijos, yo me puedo morir en paz, porque sé lo que hice con ellos en la etapa precisa".
Ahora, que el empoderamiento femenino es tema de conversación constante, Brigit asegura que entonces, su empoderamiento es sexual. "Todo el mundo quiere empoderar a la mujer y volverla casi feminista, que sean autosuficientes,y aunque eso está bien, debemos acordarnos que Dios hizo hombre y mujer y nosotras tenemos que saber que hay un rol dentro de la casa, pero, todo va en el tema de la educación y la parte de la psicología también".
Entre risas, Brigit afirma que después de que las mujeres se "empoderan profesionalmente", van hacia ella, porque, "el sexo es sexo y eso no tiene profesión".